El Swift detectó un resplador en el astro EV Lacertae, el mayor registrado en el Universo y miles de veces más poderoso que los del Sol. Astrónomos de la NASA detectaron a través del satélite Swift un resplandor en la estrella EV Lacertae, que es la mayor captada hasta ahora en el Universo, informó este martes el Centro Goddard de Vuelos Espaciales de la agencia espacial.
El resplandor fue miles de veces más poderoso que los observados hasta ahora en nuestro sol, señaló la NASA en un comunicado y afirmó que fue detectado el pasado 25 de abril.
Sin embargo, debido a que EV Lacertae está mucho más lejos de la Tierra que el Sol, el reflejo parece ser mucho menos brillante que los que surgen de la corona solar. «No obstante, es el mayor resplandor que se haya visto de otra estrella que no sea nuestro Sol», señaló.
Según el comunicado, lo que hace más importante el descubrimiento es el hecho de que EV Lacertae es una estrella mucho más pequeña y tenue que el Sol de nuestro sistema planetario.
Agregó que la explicación está en el hecho de que EV Lacertae es una estrella más joven y su movimiento de rotación es mucho más rápido que el del sol. Ese movimiento, sumado a un activo interior, produce una explosión de gases y un campo magnético mucho más poderoso que los del Sol.
La energía de ese campo magnético es la que produjo los gigantescos resplandores detectados por el satélite «Swift» el 25 de abril, señaló.
«Resplandores como este arrasarían la atmósfera de planetas donde haya vida. Esterilizarían su superficie», manifestó Rachael Osten, científico del Centro Goddard de Vuelos Espaciales de la NASA.
El resplandor y su brillo son tan grandes que nos han dado «una oportunidad de oro» de analizar un fenómeno de este tipo, manifestó Stephen Draka, otro de los científicos de la NASA.
No solo eso. Debido a que EV Lacertae es una estrella más joven que nuestro sol, el fenómeno que registra su superficie abre una puerta a la historia de nuestro propio sistema planetario, indicó el comunicado de la NASA.
«Las estrellas jóvenes tienen un movimiento de rotación mucho más rápido y generan resplandores mucho más poderosos. Por lo tanto, en sus primeros miles de millones de años el Sol debe haber registrado millones de resplandores que bombardearon la Tierra y los demás planetas, dificultando el surgimiento y florecer de la vida», agregó.
Fuente: Diario El Comercio.