Geraldine Santos, psicóloga del hospital San Juan Bautista de Huaral aconsejó a los padres, vigilar el comportamiento de sus hijos, sobre todo cuando experimentan cambios como no querer ir al colegio, no querer asearse, llorar por cualquier cosa o estar muy callado.
En estos casos los padres deben ir hablar con los profesores o tutores para indagar las causas de esas conductas.
Los niños que ven estas agresiones no deben callar y más bien comunicarlo al profesor o tutor para que tomen cartas en el asunto. El bullying genera el pandillaje y la drogadicción. Los padres deben estar atentos y darse tiempo para comunicarse con los hijos.